Ir al contenido principal

Destacados

Segunda mano

Mi amor por los mercados de segunda mano nació con este portaretrato: por suerte lo pude poner en mi cuarto en la pared de los lindos recuerdos de mi vida.  Esto lo compro mi mama en un anticuario y fue el primer regalo que ella le hizo a sus padres con su primer sueldo. No se si a ellos le gusto mucho pero la intención fue lo importante y amo me gusto. Me encanta ir a recorrer los negocios de segunda mano, porque encuentro cosas especiales que no están en todos lados. "Los brocki" como los llaman acá.  En Zürich el mercado del usado es super amplio. Hay de todo, algunos son muy baratos, otros no tanto pero yo siempre que puedo me doy una vuelta y siempre algo encuentro. Algunos se preguntaran que tiene que ver este post con la cocina y la verdad que mucho. Varias de las cosas que tengo en mi cocina las encontré en estos mercados. Platos, vasos, tazas, utensillos varios y también alguna que otra reliquia que se usaba antiguamente en la cocina: pisa papas, cucharones,

Budin aroma naranja


Un budín con sabor a naranja. La humedad y la intensidad del sabor va a depender de la cantidad de almíbar que se ponga una vez sacado del horno.

Ingredientes

4 yemas

4 claras

150 gramos de manteca

220 gramos de azúcar

2 cucharadas de ralladura de naranja

200 gramos de harina leudante (si ni hay harina común con un poco de polvo de hornear y una pizca de sal)

40 gramos de fécula de maíz

 

Para el almíbar: jugo de naranja y azúcar (1/2 taza de cada uno). Poner al fuego en una cacerola hasta que el azúcar se disuelva. Dejar enfriar

 

Preparación

Mezclar la manteca blanda con el azúcar hasta formar una crema.
 
 Mezclar la harina con la fécula de maíz. Agregar las yemas intercalando con la harina y la fécula. Agregar la ralladura de naranja y por ultimo las claras batidas a nieve.





Enmantecar y enharinar un molde de budín. Echar la preparación y cocinar en un horno a 180 grados por 45 minutos. Todo va a depender de tu horno, quizás tarda un poquito más. Pinchar con un escarbadientes para comprobar que este hecho.

Una vez afuera del horno pinchar la superficie con un escarbadientes y pincelar con el almíbar frio cuando todavía el budín esta caliente.

Espolvorear con azúcar impalpable.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares